
Cusan gran interés en todo aquel que la mira, pues tienen un rostro dulce y sereno que da paz y tranquilidad.
En Japón las niñas eran vendidas a las Okiyas, casas donde vivían todas las Geishas, bajo la tutela de una Geisha anciana a la que llamaban Okaasan .
A partir de allí, formaban parte del grupo de aprendizaje para ser Geisha,y en esta etapa la futura Geisha es conocida bajo el nombre de Shikomi. Al principio la Shikomi, realizaba tareas de servicio y su formación se iniciaba con clases de canto, baile, modales, ikebana, ceremonia del té, pero también era importante que tuviera educación, y por tanto asistían al colegio.
Cuando la Shikomi alcanzaba la edad de 15 años, ésta era ascendida a ser maiko, que es la etapa que antecede a la Geisha. Antes del nombramiento como tal se celebra una ceremonia.
Al día siguiente, se realiza la ceremonia del san-san-kudo (tres-tres-cambios). En esta ceremonia, la maiko y la oneesan-Geisha de ésta se ofrecen mutuamente sake (licor de arroz),y beben tres sorbos. Luego ambas intercambian su copa.
Cuando la Shikomi alcanzaba la edad de 15 años, ésta era ascendida a ser maiko, que es la etapa que antecede a la Geisha. Antes del nombramiento como tal se celebra una ceremonia.
Al día siguiente, se realiza la ceremonia del san-san-kudo (tres-tres-cambios). En esta ceremonia, la maiko y la oneesan-Geisha de ésta se ofrecen mutuamente sake (licor de arroz),y beben tres sorbos. Luego ambas intercambian su copa.
La nueva maiko continua con su etapa de aprendizaje, esta etapa se denomina Minarai. Es entonces cuando aprende las formas que debe tener una Geisha, conoce a potenciales clientes y se da a conocer mientras está en su fase de entrenamiento.

Es aproximadamente cuando la maiko cumple 20 años cuando ya está preparada para ser una geisha.
Después de la II Guerra Mundial esta práctica fue prohibida, así como la venta de las niñas a las okiyas. Hoy en día, las geishas y maikos que existen en Japón lo son por decisión propia.